Medianoche del mes de agosto...

Recuerdos de una medianoche templada del mes de agosto,
murmullos lejanos con ligero aroma a salitre y hierba fresca,
risas inocentes de adolescentes inquietos...
Las estrellas parecen haceros guiños desde ese cielo encantado
y la brisa estival recorre vuestros cuerpos
mientras soñais que nunca dejaréis de ser niños.

Is there freedom or not?

Trasiegos del pasado, infortunios del presente, enigmas del futuro.

Calles desiertas, murmullos lejanos y sombras de desconocidos. A través de la ventana del tiempo las personas dejan de ser personas para convertirse en recuerdos de un olvido colectivo.
Cuando era pequeña me miraba todos los días en el mueble-bar que tenía mi abuela en su casa y creía que no crecería nunca. Siempre me veía igual.
Ahora miro para atrás y no puedo olvidar los gestos y las sonrisas de los que ya no están, las fachadas de aquellos edificios que hoy no existen, las voces distorsionadas por las arrugas del tiempo, los libros con páginas amarillentas y ese olor inconfundible...
Trasiegos del pasado, infortunios del presente, enigmas del futuro.

Realidades reflejadas...

Al otro lado del espejo está él, es igual que tú pero sois diferentes, constituís dos realidades paralelas. Ser de carne y hueso ya no supone ser alguien en esta vida. No somos más que el reflejo de nuestras palabras, de nuestros sueños, de nuestras lágrimas... Eres uno y mil "yos". Desconoces cual es el real, el auténtico. Para el banco no eres más que una firma, un número, un crédito. Para el panadero sólo eres el de la barra de medio integral poco cocida... para los demás, no eres más que otro ser humano con el que te cruzas en la calles...

La búsqueda de la propia identidad se camufla entre tópicos obsoletos y símbolos de moda. ¿Quién eres? Ahí, al otro lado del espejo estás tú, pero te miras desconcertado. Lo sé. Es difícil reconocerse a uno mismo en estos tiempos que corren. No somos más que una realidad reflejada de nosotros mismos. Quizá todos deberíamos aprender a mirarnos a través del espejo de la realidad...

Regresar a ese lugar...

Debería regresar al lugar del que nunca debí salir,

recordar allí las mañanas de fiesta, las tardes de verano y tantas otras noches de mi vida,

debería volver a ese lugar donde la realidad no es tan auténtica como los sueños,

regresar y esperar allí la eternidad de una vida sin desengaños ni temores, sin lágrimas ni dolor,

bajo ese calor dulce y aterciopelado, en esa atmósfera neutra de acertijos indescifrables...

Sí, debería volver a la cama.

St. Patrick`s day

From the tip of my toes

to the top of my hat

I`m wishing you fun

on the day of St.Pat!

El pescador de sueños

Conocía de oídas a un hombre que estaba enamorado del río. Eran muchas las personas que me habían hablado de aquel hombre que había dado su vida por su única ilusión. Algunos pescadores decían que su sueño era sacar el campanu más grande de la historia de la vieja aldea, pero lo cierto es que pocos conocían realmente su verdadera historia.
Pescaba desde muy pequeño, y es que la caña había sido el mayor entretenimiento de su infancia. Mientras los otros niños se divertían jugando y corriendo, él siempre había preferido la soledad y la tranquilidad del río, su único amigo y fiel compañero. Muchos le recordaban aguardando hasta el anochecer. Allí en la orilla, contemplando las aguas tranquilas y esperando a que la suerte le permitiese llevar la cena a su casa, orgulloso, portando su merecido premio tras largas horas frente al río.
Sólo él sabía dónde se cebaban las mejores truchas y su técnica era envidiada por más de un pescador venido de la ciudad. “Esos sólo vienen aquí a lucir sus cañas y sus chalecos de diseño”, solían decir en la aldea. Pero aquel hombre prefería pescar sólo, enfundado en las viejas ropas de su padre y con la única caña que había podido comprarse con los ahorros de su infancia.
Y lo cierto es que el verdadero sueño de aquel hombre al que algunos comenzaron a conocer como “el loco del río” era morir precisamente allí, en aquellas aguas que le habían visto nacer y con las que había compartido tantos y tantos atardeceres.
Decían que aun era joven cuando un día se fue para no volver jamás. A pesar de su corta historia, cuentan que fue el mejor pescador de la zona. Y es que además de truchas y salmones, era un pescador de sueños.

un año...

Espacios esféricos...

Curvas...

Peinando canas...

Guerra y sombras

Busco luces entre las sombras, busco amor en tiempos de guerra...

mmm rosquillas...

Y luego dicen que las personas somos seres racionales...

Gato con guantes no caza ratones...

De lo que se deduce la poca utilidad de ese complemento de lana

Mini historias para no dormir (vol.4)

Está sonando el teléfono. Pero nunca llego a cogerlo a tiempo. Mi casa se convierte en un campo de fútbol más propio de Oliver y Benji, de unos 18 kilómetros de largo. Corro sin parar hasta que siento que mis piernas no pueden más. Estoy agotado. Me despiertan los latidos del corazón, totalmente sobresaltado. Llevo varios días soñando con esa maldita llamada. Quizá debería optar por no tomar cafés antes de la cena. Se ve que no me sientan bien.

Luz...

Déjame construir junto a ti lo que será nuestro futuro,
déjame demostrar cada día que todavía tengo muchas cosas para darte,
déjame contar contigo una a una las estrellas,
déjame compartir mis sueños con los tuyos,
déjame quedarme en tu corazón por siempre jamás...